Originario de China, el mahjong ha sido durante mucho tiempo un juego popular en muchos países asiáticos. En la década de 1920, los inmigrantes chinos lo introdujeron en los Estados Unidos, donde también se convirtió en un éxito en la comunidad judía. Hoy, mahjong tiene sus seguidores en otras comunidades. En un caso, el juego fue adaptado o reinventado para reflejar gustos más modernos y occidentales, un movimiento que generó bastante reacción.